En medio de la antesala de las campañas para la elección judicial del 1 de junio, las ministras Loretta Ortiz y Lenia Batres protagonizan un fuerte desencuentro dentro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
Durante un evento en la Universidad Juárez de Durango, Ortiz acusó a Batres de haber querido abandonar las sesiones para enfocarse en su campaña electoral. Según Ortiz, esto afectará directamente la operación de la Corte y dejará una pesada carga a los próximos ministros que asumirán funciones en septiembre.
“Ya se fijó un cronograma, en el que yo voté en contra, pero fue aprobado por mayoría. La ministra Lenia ya quería irse de campaña, no quería quedarse… Ya no habrá sesiones los jueves ni los miércoles cada 15 días, y tampoco se van a turnar nuevos asuntos”, declaró Ortiz.
Según la ministra, esto implicará que cerca de 8,000 asuntos quedarán pendientes: aproximadamente 1,700 ya en trámite, más otros 7,000 que dejarán de asignarse por falta de sesiones.
Ortiz también recordó un momento reciente en el que Batres abandonó una sesión, lo que provocó la falta de quórum y la suspensión de los trabajos.
“En la Corte no podemos ausentarnos. Lo que pasó en la última sesión fue que Lenia se levantó y, al no haber quórum, se terminó todo. Ahí se acabó la fiesta”, sentenció.
Finalmente, Ortiz subrayó que los jueces deben permanecer en sus cargos hasta agosto para garantizar una transición ordenada, y no dejar una Corte rezagada a sus sucesores.
